tenemos que retroceder unos siglos si queremos ver con “buenos ojos” lo que ha sucedido esta semana en Suiza; y aun así abría que lavárselos con jabón por ese golpe tan racista y xenófobo que ha sucedido en el s.XXI en una Europa “limpia” y en un país, como se considera a Suiza tan “estable”.
la ultraderecha, ha ganado las elecciones. ahora bien, el parlamento, la comisión… no sabe si dejarla gobernar ya que su puesta a punto así como su campaña electoral está cargada de connotaciones sociales racistas y xenófobas y polémica en todos los sentidos. ¡¡¡ eso que lo hubieran pensado antes, de dejarlos participar en las elecciones!!! tanta culpa unos como toda la población suiza, que se ha volcado en las urnas para darles una poderosa victoria.
el cartel con el que se distinguía su compaña electoral, creado de forma animada, divertida, amena y juvenil; rezaba: “creando seguridad”, y mediante un símil al patito feo, han actuado las ovejas blancas y negras.
donde las ovejas blancas (puros suizos) hechas “a patadas” a las ovejas negras (léase negros, inmigrantes o extranjeros no nacionalizados y que causen cualquier tipo de delincuencia) fuera del país, para cumplir y dar seguridad a todos.
un estilo de campaña y cartel provocativo que funcionando es como ha conseguido una reacción.
briefing d 